jueves, 23 de diciembre de 2010

Guillermo Deisler. Semblanza de Javier Flores Letelier

Guillermo Deisler y los orígenes  de la poesía visual en Chile




Por Javier Flores Letelier

Guillermo Deisler González fue un gran y prolífico artista chileno, el cual llevó en primera instancia una reconocida labor en su país de origen, para después extenderla en el extranjero con la misma profundidad y dedicación, producto del horrible exilio durante el régimen de la dictadura militar a la cual se opusieron ideológicamente numerosos artistas e intelectuales de la época, obligados por su pensamiento a abandonar sus países en forma indefinida. Su producción artística es basta y comprende una gama diversa de disciplinas, entre las que se encuentran la poesía visual, el grabado, el arte postal y la labor editorial, la que cumple un fin importantísimo en el desarrollo de su trabajo artístico a finales de los años 60’s a través de su sello Mimbre, publicando alrededor de 50 títulos diferentes en conjunto con una serie de grabados suyos impresos de manera artesanal. De esta manera y en esa misma época, el autor comienza a ponerse en contacto con las tendencias que circulaban a nivel latinoamericano y que se aunaban bajo el nombre de Nueva Poesía, en la cual se compartían una serie de preceptos que tenían como objetivo la búsqueda de nuevas formas de expresión poética, no con el fin de la destrucción ni de la negación de las formas clásicas, si no con la intención de la realización del enlace entre diversas disciplinas de las que no se podía negar el reconocimiento mutuo que existía entre ellas en su esencia.


Fueron muchas las publicaciones que sustentaron el movimiento, entre las que se puede mencionar Ponto, Totem y Processo en Brasil, Signos de Cuba, Diagonal Cero en Argentina y La Pata de Palo en Venezuela, dirigida por Dámaso Ogaz , entre muchas otras de igual importancia. En todas ellas se desarrollan los conceptos fundamentales de la Nueva Poesía, en las que se valora y se aprecia la materialidad del lenguaje sobre la categoría del mismo como contenedor de significados, convirtiendo de esta manera elementos como la tipografía, el soporte y la composición, en parte vital y esencial del contenido de la obra, y más allá de eso, en la obra en sí, entregando nuevas dimensiones a recepcionar y a recrear por el espectador, tanto como nuevos canales en el proceso de la asimilación e integración de la creación expuesta.

Cuatro grandes hitos marcarían el desarrollo de la poesía visual entre la década de los 60’s y comienzo de los 70’s , la exposición realizada en La Plata, Argentina, en el año 1968, la de Montevideo, Uruguay, en el siguiente año, el lanzamiento por parte de Ediciones Mimbre del libro GRRR, contenedor de la poesía visual de Deisler, y la publicación de una antología de poesía experimental internacional titulada Poesía Visiva en el mundo, en el año 1972, la que cumple el rol fundamental de ser la primera antología de poesía visual en Latinoamérica . De esta manera se producía un consolidamiento tanto del autor como de otros creadores también que se habían mantenido en niveles marginales en relación a otras corrientes artísticas, plasmando de manera concreta y fuertemente simbólica y categorizadora la labor que muchos artistas venían desarrollando de manera ferviente, pero que no había podido ser positivamente conceptualizada.

  
Tras ser detenido y enviado al exilio, Deisler vive intermitentemente en Francia y Bulgaria, llegando por fin a establecerse en Halle, Alemania, en el año 1986. Desde la distancia y la pesadumbre de haber sido arrancado de su tierra, bajo la presión constante de la búsqueda de un lugar seguro, su trabajo comienza a tomar nuevas dimensiones tanto a nivel técnico como conceptual, innovando en técnicas de grabado y solidificando una clara identidad de lucha en pos del logro del respeto que debe existir entre los pueblos. Producto de esta fuerte identidad forjada es que nacen proyectos como UNI/vers(;), el cual mostraba a artistas de todo el mundo en el formato de una representativa carpeta artesanal, y el artista se identifica y trabaja con Jörg Kowalski en la edición de la antología poética wortBILD sobre poesía visual alemana, en la búsqueda de la proyección de sus visiones.   


Deisler falleció en noviembre de 1995 en la ciudad de Halle, después de una extensa y laboriosa tarea creadora llena de pasión y dedicación, la cual supo mantener sin perder sus luces y su fuerza a pesar de la adversidad, concluyendo así sus esfuerzos y su trabajo en una identidad que hoy reconoce el Arte como origen y consciencia.  





Muestras de su obra:


Guillermo Deisler en Mail Artists Index





domingo, 20 de junio de 2010

Almandrade: La persistencia del nudismo abstracto. Semblanza de Décio Pignatari

Almandrade: La persistencia del nudismo abstracto

 Pensé en elementarismo, despojamiento, abecedarismos  geométricos, pero terminé optando por la idea del nudismo abstracto para intentar  caracterizar la postura y la impostura de Almandrade  ante sus creaciones y criaturas “sígnicas”, que vacilan entre la bi y la tridimensionalidad mediante dos o tres colores, dos o tres texturas. 
 
La parsimonia de esos objetos franciscanamente contundentes, diseñados y signados (de-signados), elaborados  siguiendo un manual de ortografía,  se “performan” de manera engañosamente significados y simplistas, en cuanto que metafísicos.
 
Crean un campo que parece significativo, que parece rechazar instrucciones “extratextuales” , incluso cuando incluyen algún elemento  in memoriam Dada

Meteoritos geométricos del pensamiento, taquigrafía precisa de una  clarísima visión cuya totalidad se eclipsa, da pistas y deja huellas de un evento artístico-mental; ocurrido en el panorama ecológico del arte del siglo XX, como un pájaro en extinción, aparición de un orden innegablemente metafísico, esencia y  formas divinas (diría Baudelaire) del pájaro desnudo de la poesía y de sus amores  descompuestos.

Un nudismo Proun (El Lissitsky) en los trópicos, añoranzas metonímicas del paraíso, bellas construcciones-instalaciones no habitables, muestras cuasi duchampescas, cuasi “bandoleroburguesas”, de un ex-Edén artístico, donde la probable ironía incrustada  no pasa de una media sonrisa. 

Estos seres correcta  y rigurosamente desnudos, el ojo los toma por enteros, como objetos que caben en el bolsillo. Y su música, pese a no ser siquiera de cámara, es de callejón, nicho y canastillo: son microtonos, mini-ideogramas sólidos  a beneficio de Scelsi.
 
Almandrade mima las miniaturas de sus criaturas, cuya “nudez” implica mudez, limpia limpieza del ojo artístico, ya cansado de la fantástica historia del arte de este siglo (pasado -N. del T.-) interminable, de este infinito milenio.





El nombre Almandrade -en realidad el artista se llama Antonio Luiz M. Andrade- está asociado a una singular estrategia dentro de lo que se llama arte contemporáneo. Artista plástico, arquitecto, maestro en diseño urbano, poeta y profesor de teoría de taller de arte en el Museo de Arte Moderno de Bahía.
Se integró en proyectos colectivos de poemas visuales, multimedia y de instalación en Brasil y en el extranjero y fue uno de los creadores del Grupo de Investigación de Lengua de Bahía que editó la revista Semiótica en 1974; realizó cerca de veinte exposiciones individuales en Salvador, Recife, Río de Janeiro, Brasilia y Sao Paulo entre 1975 y 1997; escribió en varios periódicos y revistas especializadas en arte, arquitectura y urbanismo y ha publicado varios libros de poesía y/o de obras visuales.
Tiene obras en diversas y variadas colecciones privadas y públicas como el Museo de Arte Moderno de Bahía y la Pinacoteca Municipal de Sao Paulo. Retrospectiva Museo de Arte Moderno de Bahía, 2000. Exposición "pensamientos" en el Museo Nacional de Bellas Artes, Río de Janeiro, 2002.
Ha participado en diferentes exposiciones colectivas, entre ellas:
 • XII, XIII y XVI Bienal de Sao Paulo.
• "En busca de la esencia" - Muestra especial XIX Bienal de Sao Paulo.
• IV Salón Nacional.
• Universo Fútbol (MAM / Río).
• Feria Nacional  (Sao Paulo).
• II Salón Paulista.
• I Exposición Internacional de Escultura Efímeras (Fortaleza).
• Salón Baiano.
• II Nacional de Salón.
• Mención honorífica en el Primer Salón Estudiantil de 1972.
Premios:
 • Premios en los concursos de proyectos para obras de artes plásticas del Museo de Arte Moderno de Bahía, 1981/82.
• Premio Fundarte en el XXXIX Salón de Artes Plásticas de Pernambuco en 1986 .
Libros:
• "Sacrificio del sentido", "La oscuridad de la risa", "Poemas", "Noche de sudor" y “Arquitectura de algodón”. Premio Copene de cultura y arte, 1997.
Traducción de Bruno Jordán

martes, 20 de abril de 2010

Almandrade: Poética de la levedad. Por Nicolas Bernard

Almandrade: Poética de la levedad
Por Nicolas Bernard


El trabajo de Almandrade, tanto el pictórico como el lingüístico, se ha impuesto a lo largo de todos estos años como un lugar de reflexión solitario y al margen de la escena cultural de Bahía. Después de unos primeros ensayos figurativos, en los inicios de la década de los 70, cuando ganó una Mención Especial en el Primer Salón Estudiantil en 1972, su investigación plástica se encaminó hacia el abstraccionismo geométrico y el arte conceptual.


Como poeta, manteniendo contacto con la poesía concreta y con los poemas/proceso, produjo una serie de poemas visuales. Con un estudio más riguroso del constructivismo y del arte conceptual, su arte se desarrolla entre la geometría y el concepto. Diseños en blanco y negro, objetos y proyectos de instalaciones, esencialmente cerebrales, basados en un procedimiento primoroso de tratar cuestiones prácticas y conceptuales, marcan la producción de este artista en la segunda década de los 70.
 
 Un escultor que trabaja con el color y con el espacio y un pintor que medita sobre la forma, el trazo y el color en la pantalla. El arte de Almandrade dialoga con ciertas referencias de la modernidad, reinventando nuevas lecturas. Trabaja con un mínimo de elementos pictóricos, dos o tres colores, dos planos, dos o tres texturas, un trazo, etc. Algo creativo que menospreciamos a primera vista, pero que cuando estamos inmersos en el clima que nos ofrece, encontramos como algo nuevo. La simplicidad que predomina en las composiciones despierta la imaginación y el raciocinio.


Su poesía también traduce ese principio de una poética de lo mínimo y de la levedad. Pocas palabras, versos cortos y sueltos, sintéticos, muchos sin títulos y sin adornos. Artista plástico, poeta y arquitecto, Almandrade (Antônio Luiz M. Andrade) es un pionero de la contemporaneidad en Bahía, pero sin el reconocimiento que merece su trabajo. Como dijo en cierta ocasión el poeta Cleber Borges: "Almandrade es uno de aquellos personajes aparentemente descolocados en el espacio y en el tiempo, que parece caminar hacia un lado, cuando el reloj insiste en avanzar hacia delante". Así es su poesía y su arte



Su arte y su poesía, para unos pocos, están siendo reconocidos en Brasil y en el exterior. En 1997 participa de la antología Internacional Poetry Review, con un poema traducido por el poeta americano Steven White. Hoy, el arte y la poesía de Almandrade representan el otro lado de Bahía y tiene como tema de reflexión el propio arte y el estar en el mundo. Se destaca por la diferencia y por una trayectoria singular. Como afirma el poeta Haroldo Cajazeira, Almandrade, sin dejarse devorar por la provincia, produce con su arte "un saber sobre la imposibilidad de consistencia de un sistema de signos."


El nombre Almandrade -en realidad el artista se llama Antônio Luiz M. Andrade- está asociado a una singular estrategia dentro de lo que se llama arte contemporáneo. El artista plástico, poeta y arquitecto ha producido una obra que se encamina hacia una estética minimalista, hacia una poética que se expresa utilizando un vocabulario mínimo, ya sea pictórico o linguístico. Almandrade es uno de los principales nombres de la poesía visual de Brasil de los años 70.